¿Tienes un hijo o hija con altas capacidades?

Cuanto antes se detecte mejor, puesto que el superdotado tiene necesidades educativas especiales, pero la parte afectiva, psicológica y social lo tendrá que atender la familia

El Departamento de Educación de los Estados Unidos definió las altas capacidades o ser superdotado cuando los niños o niñas y los adolescentes dan respuestas notablemente elevadas o tienen el potencial para conseguirlas, si los comparamos con otros niños de la misma edad, experiencia o en torno.

La OMS define cómo superdotada a la persona que supera un cociente de 130 en una maceta de inteligencia. En lo referente al sexo hay el mismo número de niños que de niñas, pero es más difícil detectarlo en ellas por cuestión de género y otras diferencias sociales.


¿Qué tiene que hacer la familia cuando se entera?

Cuanto antes se detecte mejor, puesto que el superdotado tiene necesidades educativas especiales, pero la parte afectiva, psicológica y social lo tendrá que atender la familia. Son niños que cuestionan la autoridad paterna si no tiene sentido por él el que le dicen o argumentan, porque son niños muy curiosos, con mucha memoria, imaginación, habilidades de rendimiento y capacidad para relacionar ideas, objetos o hechos con rapidez.

Las necesidades en el aula

  • Flexibilidad en los horarios y actividades, porque se los cuesta tolerar las interrupciones si no están muy razonadas.
  • No ejercer una fuerte presión porque tengan siempre buenos resultados o buenas notas.
  • Puede reaccionar con mal humor y agresividad verso sus compañeros si lo etiquetan, por ejemplo, de "cerebrito".
  • Es importante que se sienta integrado con el resto de la clase, aunque se traten temas que no lo interesen.
  • Se los tiene que facilitar que puedan ampliar y profundizar la información sobre temas relacionados con el arte y la ciencia que pueda interesarle.
  • En clase preferirán hacer preguntas abiertas y actividades que fomenten el pensamiento, la originalidad y la fluidez, puesto que la rutina y no poder aportar cosas nuevas se los puede provocar desmotivación.
  • No tenemos que olvidar que sus necesidades emocionales son las mismas que las de los otros niños y niñas de su mismo grupo de edad y también que como padres, madres y educadores tenemos que contribuir a incentivar su desarrollo personal, pero a la hora compartiendo con los otros compañeros sus intereses y capacidades.