Ses Majestades el reyes de Oriente han sido generosos.... Quizás un pelo demasiado y todo. Mira que has probado de convencer a todo el mundo que se estuviera de regalar demasiadas cosas, que en el equilibrio está la virtud, que los niños ya tienen mucha cosa... Pero no ha habido manera.
En un rincón de la habitación se acumulan varias cajas de juguetes a medio abrir y en otra habitación, algunas más.... Y te preguntes... qué hagamos con todo esto?
Te proponemos algunas reflexiones conjuntas para ver si encontramos la manera de poner un poco de orden.
Miráis al vuestro cercando: qué pensáis de los juguetes que habéis recibido? Hay ningún que CLARAMENTE no encaja con los valores que queréis transmitir a vuestros hijos? Os proponemos pues que la "hacéis desaparecer de casa". Parece un poco radical, pero oi que nunca daríamos de comer a nuestros hijos algo que pensamos que es prejudicial (o al menos no cada día)? Pues aplicamos el mismo principio... Podemos dar el juguete o simplemente esconderla para sacarla en contadas ocasiones, podemos intercambiarla por otra (ya esté en la tienda o con de otra gente).
Y el resto? Discernís los juguetes que son apropiadas por su edad de las que no lo son. Los juguetes que son más adecuados por más adelante simplemente, escondedlas hasta que llegue el momento oportuno. Seguro que estarán encantados de recibirlas más adelante. Si tenéis juegos y juguetes que han quedado "pequeñas" (y no tenéis previsto ninguna germanet en camino) quizás las podéis dar a algún amigo, conocido o a una ONG. Pensáis que hacéis mucho más bien dando este juguete que teniéndola escondida en casa sin uso (quién os la regaló seguro que lo entenderá).
Y ahora qué...? Ya tenemos todos los juguetes que nos gustan y son adecuados, qué hagamos? Pues un golpe más, haced una pensada... se trata de juguetes similares o son diferentes? Si se trata de juguetes similares (por ejemplo dos puzzles) pues " escondemos" una por cuando la primera esté "amortizada". Si son muy diferentes, pues elijamos unas cuántas y dejémoslas a la vista. En cuanto al resto escondámoslas por más adelante.
Resumiendo:
1- Descartamos juguetes que no se adiuen con los valores que queremos transmitir a nuestros hijos o bien guardémoslas si los gusta mucho y treiem-las de tan en tan.
2- Guardamos por más adelante los juguetes que encara no son por su edad, no hay que quemar etapas, esperamos en el momento adecuado.
3- Damos los juguetes que ya han quedado "pequeñas" o que ya no usen.
4- Dejamos para jugar un grupo variado de juguetes y el resto las guardamos para intercambiarlas por estas en un par o tres de meses.
5- Si tenemos juguetes similares, dejamos una entre el grupo de juguetes para jugar y la otra la guardamos para más adelante hacer el intercambio.
En definitiva, no tengáis miedo de reflexionar, seleccionar y actuar sobre los juguetes que os rodean. Recordáis que son un material a través de el cual los niños se relacionan e interactúan con el mundo y por lo tanto son muy importantes!