¿ Cuándo se debe introducir el huevo en los niños?

El huevo es uno de los alimentos más consumidos y aporta grandes beneficios nutricionales para todas las edades, en especial los más pequeños. El huevo es rico en proteínas, vitaminas y aporta entre un 10% y un 20% de vitaminas A, D, E y K. A través del huevo también obtenemos minerales, como son el fósforo, el selenio, el hierro y el zinc.



¿Pero cuándo tenemos que introducir este alimento tan versátil y que se puede comer en tortilla, como huevo frito o cocido? Te lo explicamos:



Aunque antes se esperaba hasta cumplir un año para introducir el huevo y teniendo en cuenta el potencial alergénico que tiene, actualmente y según las nuevas recomendaciones de la Asociación Española de Pediatría, el huevo se puede introducir a partir de los seis meses de edad.



Si tu hijo ya padece una alergia previa, y por lo tanto tiene más riesgo de alergia, por el que podría ser alérgico al huevo o antecedentes familiares de alergia, se recomienda introducir primero la yema, qué es la parte menos alergénica y no introducir otro alimento nuevo durante cinco días para descartar una reacción, después haremos el mismo proceso pero con la clara.



Normalmente la yema cocida es muy tolerado, y las manifestaciones clínicas aparecen cuando se introduce la clara. Algunos niños tienen tolerancia a la clara cocida, pero tienen sintomatología cuando el huevo está menos cocinado como pueden ser la tortilla, el huevo calentado, o el removido y con el huevo crudo presente a merengues, mayonesas...
 Se tiene que estar atentos a cualquier síntoma de alergia, y si es así y es confirmarse, este alimento se tendrá que excluir, así como sus derivados y productos elaborados con huevo. La mayoría de los niños y niñas acaban tolerando el huevo cuando superan los 3-4 años.