Por los niños y los adolescentes las vacaciones representan una rotura muy merecida, sobre todo si han aprovechado el curso.
Cuando ya se está acabando el curso escolar, es posible que muchos padres y madres se pongan de mal humor cuando piensan qué harán sus hijos e hijas con tantas vacaciones que tendrán en verano hasta que vuelvan a empezar de nuevo en septiembre.
Según Laura Baena fundadora del Club de Malasmadres que tiene una web muy activa, nos comenta que el concepto "hacer vacaciones" cambia totalmente cuando la mujer trabaja por el hecho de poder conciliar, puesto que el verano se convierte en más estresando y supone un reto por toda la familia.
Cómo organizarse en el supuesto de que los hijos e hijas sean pequeños y no puedan quedarse sólo? Podemos tener la suerte de disponer de abuelos y contar con ellos, pero muchas veces no es posible, y entonces la pareja tiene que buscar otras alternativas como repartirse las vacaciones, buscar actividades por qué hagan los niños, aparte de los cuadernos de verano para reforzar el que han aprendido en el curso que han acabado.
Si hagamos memoria recordaremos que hace unos años, todo y teniendo en cuenta que muchas mujeres no trabajaban, las vacaciones de verano de los estudiantes consistían al descansar y jugar en la playa o a la montaña con los amigos, haciendo actividades no programadas como ir en bicicleta, nadar, hacer pequeñas excursiones y otras cosas que surgían sin demasiada planificación.
Estas vacaciones diciendo más relajadas, han cambiado. Actualmente como que están acostumbrados a hacer muchas actividades extraescolares durante el curso, muchos padres y madres pensamos que si no tienen cosas programadas para hacer en verano, están perdiendo el tiempo de aprender nuevos conocimientos.
Ir de colonias o de campamentos con un esparcimiento o con los boy escouts, que están consideradas unas actividades tradicionales para ayudar a romper la rutina, y sobre todo pasar unos días fuera de casa sin la ayuda de los padres haciendo tareas diferentes, ahora si no se realizan en inglés parece que los campamentos ya no son tan provechosos, además de practicar una oferta de actividades cada vez más variada como montar a caballo, ir en quad, kayak, tiro al arco, hacer escalada, etc.
Es normal que toda la familia espere con ilusión las vacaciones y que los padres y madres programen hacer cosas conjuntas, pero cuenta!, han estudios que dicen que en este periodo un poco "idealizado", puede comportar una crisis de la pareja o la familia.
Si han hijos adolescentes será muy importante tener en cuenta sus opiniones para decidir qué cosas hacer plegados, como por ejemplo, si tenemos que programar un viaje. A los adolescentes se los hace falta también que los quede tiempo libre para "perderlo".
Las vacaciones son una oportunidad para intentar mejorar la comunicación y las relaciones familiares, sin que nos "angustie" tener tiempo libre, tan por parte de los hijos e hijas como por los padres y madres. El hecho "de aburrirnos" sin hacer actividades organizadas, nos servirá para desconectar de las rutinas y poner en marcha nuestra imaginación haciendo cosas más creativas, como manualidades, hacer juegos al aire libre, participar en juegos de mesa con amigos y familiares, leer libros y novelas de la biblioteca y otras actividades que no tenemos tiempos de hacer en el curso escolar.
Así pues, un poco de calma y a disfrutar del tiempo libre sin estresarnos al programarlo todo.