Cuando estaba embarazada tenía un deseo irrefrenable de ir a otras madres que conocía y de hacer todo de preguntas, muchas preguntas.
Y tuve la gran suerte en aquel momento de mi vida de encontrarme con amigas, conocidas embarazadas que me dieron respuestas, sinceramente, con conversaciones de aquellas que te llegan al corazón y que quizás no te gusta el que dicen, pero que te sirven por siempre jamás. Grandes consejos de grandes mujeres! (GRACIAS !!!)
Ahora, cuando alguien me pregunta intento siempre transmitir sobre todo mi experiencia de manera franca, sencilla y con mucho de humor.
Una premisa que tengo y que me ha hecho ser más feliz, es que la vida se tiene que tomar con mucho de humor porque ya nos lo amargamos bastante a veces o nos la hacen amargar, y más, en el mundo de la crianza de los hijos, el humor es una herramienta primordial!
El otro de las herramientas primordiales es la sinceridad . Siempre he intentado hablar con el corazón, y de corazón a corazón, porque el que más necesitamos cuando estamos embarazadas, cuando criamos hijos, cuando estamos angustiadas es la sinceridad.
Cómo es parir? Que tal el proceso de parte? Cessària? Y la lactancia? Nervios, miedo Y aquí perdonáis pero no vale decir tú tranquila o decir ui qué mal! O ya lo verás
No queremos sentir el mismo que las revistas, queremos sinceridad, queremos la experiencia sin dramatismos, y de manera objetiva (que por eso tenemos las revistas), queremos saber si de verdad es como las películas, si la epidural vale la pena, si te pones nerviosa, que pasa si nos hacen la cessària, si es bonito, si hace frío, si vomitas, si te cagas encima... Sí, de verdad queremos saber todo el que no pone en ninguna parte.
Cómo son los primeros días? Y aquí, perdonáis pero absteneos aquellos/se que su hijo/a duerme todo el día, toda la noche y es un santo barón, o la típica competición de si el mío pesó más y fue más largo, porque no ayuda en nada, al contrario empezamos a hacer la típica carrera de fondo de "el mío es el mejor y más grande y más guapo y más inteligente" qué horror!
He tenido 3 hijos, y tres embarazos y partes diferentes, y cuando nacieron eran feos, pero por mí los más guapos. Alguna noche durmieron, otras no... Los tres hijos "de alta demanda" y he sobrevivido, no estoy calva (de estirarme los pelos) y lloraban, no sé si mucho o poco pero lloraban Y yo también yo también lloré, he llorado y seguramente seguiré llorando a veces por falta de sueño, por nervios, por mal de jefas, porque no subían de peso cuando tocaba (llegué a soñar con la báscula ) en fin por cualquier cosa porque por eso somos madres.
Y hay tres cosas que me han ayudado mucho: la teoría de la relatividad, el buen humor y que de verdad cuando criamos hijos no hay ninguna teoría.