Los bebés entre los seis primeros meses y el año tienen todavía muy limitado los líquidos que pueden ver. En estas edades básicamente solo pueden ver tres tipos de líquidos y nada de aguas con gustos, tiene, zumos naturales o procesados, bebidas azucaradas porque los hacen más mal que bien. Vemos los tres líquidos que sí que pueden:
- Lactancia materna a demanda: La leche materna está compuesta en un 88% por agua, de forma que cubre todas las necesidades de alimento y líquido del niño. La leche calma la siete y el hambre.
- Leche de fórmula, también a demanda: si no se ha conseguido introducir la lactancia materna, la leche de fórmula es la alternativa.
- Agua pura: El agua pura se tiene que dar a partir de los 6 meses una vez el bebé inicia la alimentación complementaria y no antes. La introducción del agua puede incrementar la probabilidad de abandonar la lactancia, existe más riesgo de contaminación y de dolencias gastrointestinales y cómo sus riñones son immadurs le pueden ocasionar algún tipo de problemas o patologías graves.