Fuera mitos sobre el embarazo, un poco de realidad

El embarazo es un estado maravilloso, pero también lleno de nuevas circunstancias y experiencias nuevas por una mujer. Quieres saber qué hay de realidad en todos los mitos?

La maternidad llega en el momento del embarazo, en el momento en que las preocupaciones ya no pasan por una misma, sino que todas nuestras actuaciones tendrán una consecuencia en un tercero, y por eso nuestra mente activa un chip que dice que ya no tienes que pensar primero en tú misma, sino en el bebé.

Y así llega el primer mito, primero pensar en el bebé o hijo/a y después en tú.

No te tienes que creer que dejas incluso de existir cuando vivos un embarazo o has tenido un bebé. El término "buena madre" aparece en el momento en el cual tú eres feliz, y por lo tanto, puede hacer feliz a las personas que te rodean, empezando por tus hijos. Buscar un tiempo de dedicación propia no es ser egoísta, es coger fuerzas, relajarte y pensar en tú misma. La maternidad durará toda la vida, así que piensa un poco en tú y busca la manera de hacer las cosas mejores empezando por tu persona.

Tienes que comer por dos.

Durante el embarazo, cuántas veces has sentido esta frase? Estar embarazada no quiere decir convertirte en una persona que no eres. Y tanto que tienes que comer!, pero con ninguno, que a pesar de traer un bebé dentro continúas siendo una persona,  y el bebé cogerá de tú todo el que necesite. Llevar una dieta equilibrada es esencial, y si quieres buscar excusas, come por dos, pero recuerda que pasado el embarazo los kilos no marcharán sólo.

Mejor no hacer deporte.

Siempre has tenido una vida activa deportiva? No sufras, este también es un mito. Hacer ejercicio es cada vez una garantía de embarazo saludable. La práctica de deporte tiene que estar en conocimiento de tu ginecólogo y tienes que tener mucho cuento sus prescripciones médicas.

Tienes que adaptar la actividad física en el momento del embarazo y tus condiciones. En general, los deportes de contacto es mejor evitarlos.

Recuerda que el ejercicio ayuda a tu cuerpo e inclús puede contribuir a un parto mejor y más rápido. Después del parto te ayudará a recuperar la tonificació y salud de tu cuerpo.

Durante toda la maternidad es una vía genial para encontrar tiempo por tú misma, salir de la rutina familiar y cargarte de energía.

La forma de tu barriga.

Es una creencia que en función de la forma de tu barriga podemos saber el sexo del bebé. Si la barriga tiene forma pincha, es un chico, y si es más redonda, será una niña. Pero no hay ningún dato científico que demuestre esta teoría.

Hoy en día la única prueba que nos permite conocer el sexo del bebé es la ecografía.

Los ardores son por el cabello.

Este mito ha sobrevivido a un montón de generaciones. Tradicionalmente se creía que una embarazada sufría ardores estomacales debido al cabello que tenía el bebé.

En realidad la causa real es física y química a la vez, por un lado el aumento de progesterona que provoca la relajación del esfínter que controla los ácidos del estómago, y por otra banda, durante el embarazo se produce una disminución del ácido clorhídrico al cuerpo que dificulta las digestiones.

La otra causa física corresponde al crecimiento del útero, que oprime el estómago provocando la subida de los ácidos.

Prohibidos los baños.

Antiguamente se creía que durante el embarazo podría entrar agua en el útero.

Lejos de la realidad, y gracias al tapón mocós, el útero está perfectamente aislado del exterior, tanto de gérmenes como de bacterias.

Sólo en el caso de rotura de la bolsa amniótica en las fases iniciales del parto sería preferible una ducha al baño.