La salud de la mujer tiene una gran trascendencia durante el embarazo y es muy importante para el desarrollo del bebé. Para garantizar la salud de la gestante y del futuro bebé se tienen que adoptar hábitos saludables que incluyan deporte, controles ginecológicos y alimentación saludable. Dentro de la alimentación tenemos que tener en cuenta los minerales esenciales. Los principales minerales que hay que tener en cuenta para el embarazo son seis y son el hierro, el calcio, el yodo, el zinc, el magnesio y el fósforo.
El Hierro
Es el primer mineral esencial del embarazo, puesto que fomenta la creación de glóbulos rojos, encargados de transportar el oxígeno en la sangre. El aumento de sangre sirve para la formación fetal y la placenta, y también, para la buena salud de la madre. Durante el embarazo tenemos que priorizar los alimentos ricos en hierro como la carne roja, preferiblemente magra, además de los mariscos, moluscos y almejas. También las legumbres aportan una buena cantidad de hierro para las opciones vegetarianas.
El calcio
Este mineral también es uno de los indispensables, puesto que ayuda a la correcta formación ósea y dental del futuro niño o niña. Además, es importante para la coagulación sanguínea y la contracción muscular. La mejor manera de consumirla es a través de los productos lácteos, y es mejor en yogures que en la leche, puesto que facilita la absorción. Si tenemos intolerancia a los lácteos o nos dan malestar podemos optar por lácteos sin lactosa o bebida vegetal de almendras, que también es rica en calcio.
El yodo
El mineral principal de las hormonas tiroideas. Su déficit puede comportar problemas mentales o aborto espontáneo. El yodo abunda a los alimentos provenientes del mar como el pescado, el marisco y las algas.
El zinc
Ayuda en la formación de los sentidos del gusto y del olfato, y en la creación del sistema inmunitario. Mejoraremos la aportación de este mineral si incrementamos la ingesta de ternera, pavo, pollo, almejas o las pipas de calabaza.
El magnesio
Importante en numerosos procesos del metabolismo y como el calcio, en la formación ósea. El magnesio está relacionado con contracción muscular y cardíaca y su déficit podría estar relacionado con la preeclampsia, o el que es el mismo, la hipertensión en el embarazo. El magnesio se acumula en los vegetales de hoja verde, así como en los cereales integrales y los frutos secos.
El fósforo
Nos ayuda en la formación ósea, pero también en la formación del ADN y el ARN. El fósforo está presente en carnes, pescados, quesos, huevo y el cacao.