La tosferina es una enfermedad muy contagiosa que es causada por la bacteria bordetella pertussis, razón por qué también se conoce como tos convulsa o pertussis. Cuando se sufre la bacteria bordetella pertussis, esta se adhiere a los cilios que recubren parte del aparato respiratorio superior y liberan toxinas capaces de perjudicar los cilios inflamando las vías respiratorias.
La tosferina se transmite entre personas normalmente al toser o estornudar, o si comparten durante mucho tiempo el mismo espacio donde respiran. Esta dolencia es muy grave en bebés, puesto que los puede causar la muerte, y personas afectadas asintomáticas pueden contagiar bebés sin llegar a saberlo, por lo cual se recomienda la vacunación de los padres cuando hay un bebé a casa. Las personas infectadas son más contagiosas unas dos semanas después de que aparece la tos. Los antibióticos pueden acortar el periodo durante el cual una persona es contagiosa.
Las vacunas contra la tosferina son actualmente la herramienta más eficaz que existe, aunque la vacuna no presenta una eficacia del 100 %, aunque con la vacuna la dolencia no es tan grave.