Como hacer realidad los propósitos que nos vamos al año nuevo?

Seguro que hace días que te rondan por la cabeza los propósitos de año nuevo que con las más buenas intenciones te hiciste este mes de enero. Casi como una maldición van ocupando espacio mental, mezclándose ilusión y frustración a partes iguales, seré capaz de llevarlos a cabo?

Es inevitable hacer balance de cómo hemos vivido este último año y del que nos gustaría hacer el que viene. La lástima es que la mayoría a veces todo se queda en buenas intenciones. Y es que al final, sabemos el que queremos pero no tenemos un plan para conseguirlo.

Cómo que no sabemos cuál es el siguiente paso después de desear, nos quedamos allí, a la voreta del acantilado pensante de qué manera podemos volar hacia el otro borde.

Yo soy una fanática del crecimiento y el aprendizaje, por eso los propósitos de año nuevo me encantan.

Aunque al final no consiga todo el que me propongo, son unos días como de paréntesis y se crea una atmósfera de ilusión que me permite soñar más allá de mis límites.

Y ademanes a soñar, hagámoslo bueno!

Por eso hoy te propongo una guía porque los propósitos que te hiciste los puedas seguir con más facilidad:

1- Sueña en grande sin esperar nada

Una de las cosas que más nos cuesta es soñar más allá del que estamos acostumbrados a pensar. Si quieres un trabajo nuevo dices: "mientras tenga para vivir y me encuentre bien ya tengo bastante..."

Pero que pasaría si te permitieras soñar el doble? O multiplicarlo por 10? Que después me frustraré si no lo consigo, debes de pensar. Bien,  para ir a por a pesar de minimizar la frustración y el estrés mental la clave es no esperar nada.

[su_quote]Para ir a por a pesar de minimizar la frustración y el estrés mental la clave es no esperar nada[/su_quote].

Tu propósito es multiplicar por 10 tu calidad de vida en familia, o tu salud o la autoestima pero siendo consciente que es posible que no lo logres.  Ya pero... entonces no iré a por todas...

En realidad el que te impulsará de verdad es un propósito que te haga realmente ilusión y no un propósito aceptable o supuestamente posible.

Y al mismo tiempo que seas consciente que quizás te quedas a medio camino... es decir, más que aceptable!

El que queremos es apuntar muy alto porque tu mente piense estrategias más allá de la experiencia (del pasado).

Según Dan Sullivan, si sólo te propones el doble, tu mente va al pasado y dice: qué hice para obtener el que tengo? Ok, pues voy a duplicarlo.

Pero si te propones multiplicar tus resultados por 10 la cosa cambia. Porque sale totalmente del que has visto y pensado hasta ahora. Te obliga a romper límites mentales y buscar caminos más creativos e imaginativos que te llevarán más lejos.

Atrévete a soñar por 10 y deja volar tu imaginación!

2- Distingue sobre el que tienes poder de cambiar y el que no

Constantemente tengo madres y padres a la consulta que el que quieren trabajar es que su hijo o hija sea de otro modo. "Quiero que mi hija no se estrese tanto con los exámenes", o "quiero que mi hijo se pueda estar quieto y tranquilo". Es normal, todo el que estiércol tiene una intención positiva: proteger, servir por algo o prevenir. Y es lógico buscar una solución en aquello que consideramos un problema. Pero para poder lograr un propósito antes que nada tienes que tener control sobre él.

[su_quote]Para poder lograr un propósito antes que nada tienes que tener control sobre él.[/su_quote]

Así, a la hora de formular un propósito relacionado con tus hijos o vida en familia, formúlalo de forma que seas consciente del que está en tus manos.

Por ejemplo: si el que te gustaría es que tu hija no sufriera tanto con los exámenes, piensa, de qué manera puedes contribuir tú a que tu hija aprenda a gestionar sus emociones y que no la sobrepasen?

Tú no puedes decidir como se tiene que sentir tu hija ante los exámenes, y por mucho que le digas como se lo tiene que tomar, dudo que consigas nada. Y probablemente ya le has explicado qué tendría que hacer y por qué no tiene que ponerse así.

Pero... esta estrategia ha servido para conseguir tu propósito? Si la respuesta es no, ha llegado el momento de cambiar el que está fallando. El propósito aquí podría ser este: "contribuir a que mi hija aprenda a gestionar sus emociones y el estrés durante los exámenes".  Este será el propósito que está 100% en tus manos y que a partir de aquí puedes investigar o buscar algún profesional que te oriente para conseguirlo.

Por ejemplo, puedes marcarte unas acciones concretas para lograr este objetivo transformándolo en pregunta: de qué manera puedo hacerlo? Y aquí no te quedes sólo con el primero que se' te ha acudido! Piensa, investiga, crea más de 10 acciones concretas que puedes hacer (ser un buen ejemplo de gestión emocional, respetar el que siendo, aceptar como lo vive,...)

El que tu hijo o hija piensa, siendo o hace no está dentro de tu control. Esto es el primero que tienes que entender.

Cuando te centres en el que tu hijo hace que no te gusta el que consigues es intensificar tus sentimientos de que tu hijo "es inadecuado" y que tiene que cambiar. Te estarás enfocando constantemente en el que tu hijo hace mal (y tú no te sentirás en equilibrio emocional precisamente).

 "Pero si no me centro en esto no cambiará nunca! No puedo hacer como si no me importara!" De acuerdo, pero no te estoy diciendo que no te importe, sino que cambies tu foco.

[su_quote]Sólo cuando te centres donde realmente puedes actuar podrás influir positivamente en tu hijo o hija.[/su_quote]

Tu propósito es que tu hijo o hija se sienta válido o inadecuado? No puedes decidir ni controlar sus acciones, pensamientos y sentimientos. Pero sí que puedes influir aceptándolo tal y cómo es, confiando con él y dándole la opción de aceptar y gestionar sus emociones.

No he dicho que sea fácil. Pero aquí entra la tercera clave:

3- Tengas claro por qué es importante para tú este propósito

La razón por la cual los propósitos se quedan en simples intenciones es porque no hay un compromiso firme, sólo una simple motivación. El que te ayudará a seguir construyendo tu propósito será recordar para que te lo has propuesto. Por qué es importante para tú vivir momentos de calidad con tu familia? Por qué es importante para tú tener un trabajo que te dé más tiempo y más dinero? Por qué es importante para tú contribuir en la felicidad de tus hijos o tu pareja? Cómo te hace sentir construir este propósito? Hasta donde estás dispuesto a llegar para lograrlo?

[su_quote]La razón por la cual los propósitos se quedan en simples intenciones es porque no hay un compromiso firme, sólo una simple motivación.[/su_quote]

En la primera charla que hice sobre comunicación empática con los hijos una madre me dijo: pero hacer esto es muy difícil! Costa mucho! Cuando le pregunté qué estaría dispuesta a hacer por sus hijos enmudeció. Lo harías todo por ellos, y creo que acompañarlos en el crecimiento y autogestión emocional y personal es un viaje fantástico que, más que un reto o propósito, puede ser tu forma de vivir.

Y tranquilo, no hay prisa por este propósito, tienes toda la vida para aprender con ellos. Y cada situación emocional que se te plantea es una oportunidad más para construir vuestra relación e inteligencia emocional.

4- Suelta el que no necesitas

Puede ser que cuando te propongas un cambio te vengan todos los males. Porque ya tienes suficientes cosas a hacer... sólo te falta añadir de nuevas!

A cambio de esto, un golpe tengas escrito tu propósito y el tuyo "para qué" poderoso puedes hacer una lista de acciones que actualmente haces y que te alejan de tu propósito. A veces no se trata de hacer más sino de hacer el que hace falta. Identifica aquello que haces que no te sirve para nada, te saca energía o te impide construir tu propósito. Un golpe identificado, sustitúyelo por una acción más efectiva y concreta.

[su_quote]Haz una lista del que actualmente haces y que te aleja de tu propósito, seguidamente cámbialo por acciones más efectivas y concretas.[/su_quote]

Por ejemplo: si tu hijo es de los que se quita tarde y tarda tres horas a vestirse, almorzar y salir por la puerta y el que haces es repetirle cada mañana el mismo sin éxito. Pregúntate: qué funciona de esta estrategia? Que no funciona de esta estrategia? Qué puedo mejorar? De qué manera puedo actuar la próxima vez para conseguir mi objetivo? El importante es que sean acciones claras y concretas.

No vale esto de: "intentaré tener más paciencia". Cómo se hace esto de intentar tener más paciencia? No sabrás ni por donde empezar. Busca una alternativa determinada: cuando suene el despertador de mi hijo le diré sólo dos golpes el que espero que haga y la hora que quiero que esté listo y confiaré en él.

Cómo que no puedes controlar el que él hará, plantéate una solución si no hace el que esperas y exprésale: "a las 8 y media espero que estés almorzado, vestido y listo para marchar. Si no estás listo marcharemos tal y como estés". Así tu hijo sabe las consecuencias exactas de no hacer el que se espera de él. Y aquí tienes que ser coherente con el que has dicho, porque la base de la confianza es hacer el que dices. Si no estás seguro de poder cumplirlo, busca otra consecuencia con la que te puedas comprometer. Aquí el más importante es que tu hijo tenga claro el que tiene que hacer y las consecuencias de no hacerlo. Y cuanto más naturales sean las consecuencias mejor. Si no está listo a las 8h no tiene sentido que la consecuencia sea no ir al parque por la tarde, porque no hay una conexión entre las dos acciones. En cambio que llegue tarde a la escuela o, si es más grande, que tenga que marchar con el buzo tiene lógica, es el que nos pasa a nosotros cuando nos retrasamos.

5- Desapriétate del resultado

Cuántas veces te has hecho un propósito y has sido tan pendiente de lograr el objetivo que no has disfrutado del camino? Es más, se te ha hecho más llevar. Para mí los propósitos u objetivos no tienen ningún sentido si no creces con ellos, si no saboreas los regalos del camino. Si tienes la necesidad de lograr aquel objetivo para ser feliz automáticamente estás poniendo tu atención en el que te falta. Y las emociones que surgen son de carència, invalidez, lucha y esfuerzo. Vive, diviértete y sácale importancia en el objetivo, porque el único que tienes es el ahora, y la felicidad sólo la puedes encontrar en el momento presente. Céntrate en cómo puedes construir el propósito ahora y confía en que llegará el día en que lo logres, o no, pero habrás vivido con presencia y plenitud.

[su_quote]Si tienes la necesidad de lograr aquel objetivo para ser feliz automáticamente estás poniendo tu atención en el que te falta y las emociones que surgen son de carència, invalidez, lucha y esfuerzo[/su_quote]

Para acabar te regalo unos propósitos que puedes plantearte y que se encuentran el 100% en tus manos:

• Aceptarte tal y cómo eres y aceptar tus hijos y pareja tal y cómo son.
• Respetar el que sientes, escucharlo y aprender a expresarlo de forma positiva.
• Aprender a gestionar tus emociones para ser un ejemplo por tus hijos de cómo hacerlo.
• Perdonarte más y exigirte menos, apreciar los esfuerzos que haces y los del resto de la familia.
• Jugar más, distraerte más, divertirte y dejar tiempo para no hacer nada.
• Aprender a hablar a tus hijos sin atacar su carácter.

Qué dices, te apuntas a los retos del 2018?