En el caso de la mona tradicional o antigua se corona con azúcar y un huevo cocido FOTO: Cedida

Familia

Como hacer la mona más tradicional en familia

La mona de Pascua es una de las tradiciones más arraigadas de la Semana Santa. En el caso de la mona tradicional o antigua, que en los últimos años ha vuelto a tener cierta relevancia, se trata de un pan dulce, esponjoso y aromatizado, que se corona con azúcar y un huevo cocido.

En las monas más modernas, los huevos cocidos se han cambiado por huevos de chocolate, y complementan la decoración las plumas de colores, los pollitos, los muñecos de películas y dibujos... Aun así, la tradición marca que los padrinos tienen que regalar una mona a sus ahijados durante el Lunes de Pascua. En estos tiempos de confinamiento por la crisis del coronavirus, recomendamos que la mona se elabore en casa y con ayuda de toda la familia.

 

Ingredientes para 2 unidades

  • 100 g de harina de fuerza
  • 60 ml de agua
  • 12 g de levadura fresca de panadería
  • 400 g de harina de fuerza
  • 12 g de levadura fresca de panadería
  • 6 huevos
  • 200 g de azúcar
  • 80 g de aceite de oliva
  • Ralladura de naranja
  • 15 ml de agua de azahar
  • Un pellizco de sal

 

Elaboración:

  • La noche anterior a la elaboración de la mona disolveremos la levadura en el agua y añadiremos la harina en las cantidades indicadas. Mezclamos sin amasar, tapamos con papel film y la dejamos a la nevera.
  • Al día siguiente sacamos la masa de la nevera y la dejamos templar.
  • En un recipiente mezclamos los tres huevos, reservamos los otros tres, el aceite y el agua de azahar. Añadimos la masa de la noche anterior, la ralladura de naranja, la levadura y 150 g de azúcar, ya que reservaremos el resto, integramos. Añadimos la harina y seguimos removiendo. A mediados proceso y añadimos la sal.
  • Cuando hayamos incorporado toda la harina amasamos sobre un mostrador hasta obtener una masa elástica. Podemos añadir un poco más de harina si la masa está pegajosa, pero lo mejor es amasar unos minutos y esperar a que la textura cambie. Debemos saber que nos pasamos de harina la massa quedará dura.
  • Una vez conseguida la consistencia, hacemos una bola y la dejamos reposar en un recipiente fondo ligeramente enharinado y tapado con un paño o un film. Lo dejamos en un lugar seco y a temperatura ambiente hasta que doble el volumen. Cuando esto ocurra dividimos la masa en dos y hacemos dos bolas. Hacemos un agujero en el centro de cada bola y colocamos un huevo (previamente bien lavado), tapamos de nuevo y dejamos doblar su volumen.
  • Batimos el último huevo que tenemos y pintamos las dos monas. Mezclamos los 50 g de azúcar con unas gotas de agua y, para un toque extra de sabor, con agua de azahar. Repartimos el azúcar por encima los dos pasteles, precalentamos el horno a 180°C con calor arriba y abajo y cocemos unos 25-30 minutos.