Retorno al Instituto
Por septiembre el retorno de los hijos e hijas a los centros educativos, supone por toda la familia momentos estressants y el volver a readaptar los horarios, a pesar de que ya tenemos ganas de recuperar las rutinas de los horarios escolares y otros hábitos sociales.
El cambio que supone por los más pequeños empezar la escuela cuna o la educación infantil se los puede provocar varias reacciones para adaptarse, pero seguro que a la cabeza de pocos días sustituirán no ver tanto a los padres para reencontrarse con los compañeros o hacer nuevos amigos.
Quizás que algunos niños de Primaria estén nerviosos unos días antes de empezar el curso, pero muchos también desean reencontrarse con sus compañeros.
Pero cuando tenemos hijos e hijas adolescentes el retorno puede ser más complicada porque la mayoría ha relajado mucho los horarios saliente de fiesta por las noches y sobre todo a la hora de ir a dormir.
Se ha demostrado que a la pubertad se cambia el ciclo de dormir, el reloj biológico se vuelve más lento y se los cuesta más coger el sueño por la noche, a pesar de que necesitan dormir al menos unas 9 horas y también el cuerpo se los pide levantarse más tarde.
No podemos olvidar el uso de los dispositivos electrónicos que hacen los adolescentes. Por la noche disponen de más calma y silencio para hablar con tranquilidad a su habitación o a su cama hasta altas horas de la noche, puesto que normalmente el resto de la familia ya está descansando.
El hecho de dormir menos horas de las que necesitan, influye en la capacidad de concentración, memoria y en el rendimiento físico e intelectual. También se los provoca un aumento del estrés, irritabilidad y nerviosismo. Además, la utilización de estos medios también los cansa físicamente. Todos estos factores pueden provocar aumentar el fracaso escolar.
[su_quote]Varios estudios demuestran que la utilización de los dispositivos electrónicos (mesita, ordenador, teléfonos móviles, etc.) poco antes de ir a dormir, dificultan el sueño [/su_quote]
En muchos países occidentales las clases de Educación Secundaria empiezan a las 8 de la mañana, una hora antes de las de Infantil y Primaria. Actualmente se está debatiendo por parte de expertos que el horario de las clases se tendría que adaptar a las necesidades biológicas de los alumnos adolescentes, retrasando la entrada a las 10 de la mañana.
El Departamento de Enseñanza ya hace tiempo que recibe avisos de los profesores de secundaria informando que los alumnos se duermen a primera hora o llegan tarde a clase por problemas de sueño.
Actualmente en Cataluña hay un fuerte debate y se están realizando diferentes estudios para adaptar nuestros horarios a los europeos, lo cual se traduciría en un cambio de hábitos escolares y sociales y ayudaría a conciliar la vida familiar y laboral.